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Universidad Centroamericana - UCA  
  Número 245 | Agosto 2002

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Nicaragua

La guaca: tesoro, sepultura y proceso de maduración

Guaca es el tesoro escondido cuyo hallazgo es fiesta. Es el tesoro que se esconde con temor de que lo descubran. Guacas eran las sepulturas de nuestros antepasados indígenas. Guaca es un hoyo en la tierra donde se ponen a madurar las frutas. Nicaragua ha hallado una guaca, la ha abierto y confía en enterrar en ella lo peor de su historia para que madure un mejor futuro.

Equipo Nitlápan-Envío

El 7 de agosto, tras una expectativa alimentada durante cuatro tensos días por los medios, Enrique Bolaños inició la ofensiva final contra Arnoldo Alemán y su círculo de hierro, objetivo prioritario en su lucha contra la corrupción. Pasó por fin de una estrategia política a una estrategia político-judicial. En acto solemne, la Procuraduría General de la República reveló a la nación cómo Alemán dirigió el robo de cien millones de dólares a una docena de instituciones del Estado para "lavarlos" en bancos panameños y en empresas "de papel" engrosando así su patrimonio y el de familiares y allegados. El hallazgo de esta primera guaca de Alemán causó tanta indignación como esperanzas. Institucionalmente, legalmente, política, social y éticamente, el 7 de agosto fue histórico para Nicaragua.

Por primera vez

Qué había dentro y cómo se llenaba la guaca del Presidente Alemán venía siendo denunciado desde hace años -incluso con pruebas parciales que ahora aparecieron- por destacados periodistas y algunos valientes juristas en los medios de comunicación de mayor prestigio y audiencia. Las tendencias del Presidente a hacer su guaca eran sabidas y repudiadas por la comunidad internacional. Sobre ellas alertó desde el cargo de Contralor Agustín Jarquín, actitud pionera que le costó la cárcel. Cómo estaba aumentando su guaca Alemán fue un hecho bien conocido y cómplicemente ocultado por el FSLN cuando pactó con Arnoldo Alemán.

La guaca de Alemán fue comenzada a investigar cuando Bolaños llegó al poder en enero. Y esto es lo histórico, lo ejemplar, lo moralizador. Por primera vez en Nicaragua, en el traspaso de mando, el gobierno entrante llegaba con la voluntad de actuar con transparencia, exigiendo cuentas claras y ordenadas a cada uno de los equipos de las instituciones del gobierno saliente. Y no sólo: con la voluntad de sancionar los delitos que detectara.

Esto no pudo ocurrir en el convulso y violento tránsito del somocismo al sandinismo. No hubo voluntad de que ocurriera en el inesperado tránsito del sandinismo al chamorrismo. Tampoco la hubo en el tránsito del chamorrismo al alemanismo. Así, la filosofía del Estado-botín fue criando costra con cada vez más turbias y espesas alianzas, y así el reino de la impunidad fue haciéndose inexpugnable. Lo histórico ahora es sentar de una vez en el banquillo tan arraigada cultura de la corrupción.

Piezas de un rompecabezas

Convocada a una tarea inédita, la Procuraduría General de la República -única institución estatal no secuestrada por el pacto- empezó a recibir desde enero denuncias, informes, estados de cuentas, transferencias sin soportes... Todas, piezas de un gran rompecabezas que presagiaba el diseño de una colosal corrupción institucionalizada. El 7 de agosto entendimos que el caso del Canal 6 (febrero) y la detención de Byron Jerez y la apertura de dos casos contra él ("checazos" y "camionetazos" en febrero y abril) eran piezas de ese mismo rompecabezas. Y aunque no se sabía aún el lugar exacto que ocupaban en el diseño permitieron empezar a actuar.

Al inicio hubo mucho de improvisación en la Procuraduría, caminando sobre un terreno accidentado y nunca antes transitado por ninguna institución estatal. El 7 de agosto entendimos que, ante la avalancha de piezas que se iban acopiando, era necesario que la Procuraduría hiciera una pausa, trazara una estrategia y pidiera ayuda. Por fin, la Procuraduría pudo presentar a la nación el diseño general del rompecabezas, y por la gran cantidad de piezas ya colocadas, pudo probar un modus operandi en la corrupción dirigida por Alemán y Jerez. Sin el levantamiento del sigilo bancario en bancos panameños, sin la colaboración de la Interpol, sin la acción de las autoridades del gobierno de Estados Unidos sobre las autoridades de Panamá, y sin el financiamiento de la Unión Europea a la Procuraduría, tan escasa de recursos, no se hubiera podido armar este rompecabezas.

"Características mafiosas"

El 7 de agosto, la Procuraduría abrió sólo una de las guacas de Alemán y anunció que está en capacidad de abrir más, de las que espera resultados estremecedores. Al explicar en cadena de radio y TV de forma didáctica un único caso, el Procurador Francisco Fiallos afirmó tener en su poder bajo investigación más de 10 mil cheques. El caso explicado esa noche ante una audiencia expectante abarca todo el período de Alemán (enero 1997-enero 2001).

En esta primera guaca abierta, y en números redondos, fueron saqueados del Estado 100 millones de dólares en un procedimiento que Fiallos calificó de características mafiosas. El dinero salía en transferencias de varios tipos de las instituciones del Estado hacia la Presidencia, hacia personas privadas, hacia un conjunto de empresas de Jerez, de Alemán y de ambas familias en Nicaragua y en el extranjero, para después entrar a lo que llamó el embudo: la cuenta de la Fundación Democrática Nicaragüense, para de ahí regresar a negocios familiares, a sobresueldos para altos funcionarios, a testaferros, a compras de lujosos inmuebles, a gastos de placer...

Dolor vergüenza, indignación

En la compleja telaraña en la que circulaba el dinero, entrando y saliendo, moviéndose de una cuenta a otra, se expresa el propósito de borrar rastros y huellas, y está la prueba de que se trata de una clásica operación de lavado de dinero. En Nicaragua no existe ni capacidad ni experiencia para moverse con éxito en los bien tensados hilos de telarañas de este tipo. Sin ayuda de gobiernos amigos hubiera sido imposible dar con el trazado de este dinero, reconoció Fiallos, quien al terminar su exposición, dijo a Bolaños y a la nación: Misión comenzada y en progreso. Sólo diremos misión cumplida cuando traigamos de regreso todo este dinero al pueblo de Nicaragua.

Bolaños pronunció después un discurso muy convincente. Inició reconociendo el dolor que le causaba presentar al país semejante acusación. Arnoldo, estoy triste y desilusionado... Nunca me imaginé que traicionarías así a tu pueblo... Nos llenan de vergüenza e indignación estos hechos... Uno de los factores que más ha causado y mantenido nuestra pobreza es la corrupción... Debemos cortar ya con esta degradante tradición... Bolaños sí cumplió una misión esa noche: logró como Presidente con vocación de estadista lavar su deslucida, cuestionada y sospechosa gestión como Vicepresidente de la República durante el gobierno de Alemán.

Lavado de dinero: por primera vez

Arnoldo Alemán y trece personas más son los primeros nicaragüenses acusados por el delito de lavado de dinero, recientemente tipificado en la legislación nacional. El mismo 7 de agosto la Procuraduría acusó ante los tribunales de justicia por éste y por otros cuatro delitos vinculados a Alemán, su hermana Amelia, su hija María Dolores, su hermano Álvaro, su cuñada Mayra, su sobrino Arnoldo; Byron Jerez, su esposa Ethel, su hija Valeria y sus dos asistentes Ligia y Auxiliadora; y tres altos funcionarios ya prófugos de la justicia: el ex-Ministro de Hacienda Esteban Duquestrada, el ex-Director de ENITEL Jorge Solís, y el secretario privado de Alemán Alfredo Fernández.

Para todos ellos, la Procuraduría solicitó orden de captura, allanamiento de morada, retención migratoria, embargo o secuestro de bienes, congelamiento de cuentas bancarias, levantamiento del sigilo tributario y del sigilo bancario sobre sus cuentas, secuestro de libros y registros de las personas jurídicas involucradas y de las empresas de las que son socios. El necesario símbolo ejemplarizante de verlos capturados por la policía y declarando ante los tribunales se demostró de momento imposible: once ya estaban fuera de Nicaragua, Alemán y su hija gozan de inmunidad parlamentaria y Amelia permanece hospitalizada por un cáncer. Una encuesta nacional hecha días antes del destape de la guaca mostró a un 81.5% apoyando a Bolaños para que lleve la lucha contra la corrupción hasta las últimas consecuencias, caiga quien caiga y a un 70.7% considerando que Alemán debe ir preso.

Contraataque y confesión

Las reacciones de Alemán y de dirigentes del PLC arnoldista al día siguiente de la revelación de la guaca fueron airadas y, de hecho, los incriminan como delincuentes. Alemán informó que Bolaños, como otros altos funcionarios, se habrían beneficiado del "botín", a través de sobresueldos extrapresupuestarios (¿extraídos de la guaca?) que Alemán pagaba en efectivo y en sus oficinas. (Confesión de irregularidades delictivas y prueba del estilo de capataz mafioso con que se relacionó con sus subordinados). El PLC informó que habían utilizado el dinero detectado en "el embudo" de la guaca para actividades operativas, políticas y financieras del partido, especialmente durante las campañas electorales. (Confesión de un delito tipificado en la Ley Electoral y de otros delitos relacionados con la fusión Estado-Partido).

Alemán le reclamó a Bolaños violar el código de ética política de este país por acusar a sus familiares. (Confesión de que él los hizo partícipes de sus delitos). Y lo acusó de romper el orden institucional por no haber tenido en cuenta a la Fiscalía y a la Contraloría en esta investigación. (Tácita confesión de que sigue contando con ambas instituciones para garantizarse impunidad). Alemán calificó a Bolaños de pequeño dictador y el PLC repudió su gobierno, desconociéndolo como liberal. Desde hace meses y durante todo el día, "La Poderosa", emisora arnoldista -cuya frecuencia es propiedad de la Arquidiócesis de Managua- llama a Bolaños viejo perverso, asesino, rata de dos patas, anciano maldito, loco senil y otros etcéteras, clamando porque sea destituido y hasta fusilado.

Estrategia hecha trizas

Desde enero, cuando tomó posesión, el Presidente Bolaños inició su estrategia política destinada a rescatar el PLC del poder caudillista de Alemán y a debilitar al caudillo en el escenario político nacional. El principal obstáculo con que se encontró se lo había colocado el FSLN: la diputación que Daniel Ortega le regaló a Alemán en el pacto del 2000 permitió a Alemán instalarse al frente del Parlamento y atrincherarse allí acuerpado por los diputados liberales que él mismo seleccionó, precisamente para que nunca jamás le retiraran la inmunidad con que se protege.

La estrategia arnoldista de desafiar a un Ejecutivo que no controlaba desde un Legislativo que controlaría con la mayoría parlamentaria -y dosificando complicidades con los diputados de Ortega-, fue cuidadosamente calculada. Calculado también el dejarle a Bolaños el enorme obstáculo de un presupuesto irrealizable y sin financiamiento, para que "no arrancara" nunca en el terreno económico. De esta forma, Alemán planeó mantener el control del PLC, proyectarse como próximo candidato presidencial y garantizarse impunidad.

El terco empeño -por decisión moral, austeridad personal y pragmatismo político- de Bolaños de enfrentar la corrupción, un cáncer que devora la economía nacional antes de que dominara el devorador modelo neoliberal- ha ido erosionando la estrategia de Alemán. Y, quién iba a imaginarlo, los giros en la política exterior de Estados Unidos tras el derrumbe de las Torres Gemelas están contribuyendo a desmontarla.

Si Arnoldo Alemán hubiera interpretado evidencias y señales, hubiera cedido antes de que se desatara contra él esta ofensiva final. No lo hizo. Contando con la lealtad incondicional de un grupo de dirigentes de las estructuras partidarias, con la simpatía explícita de un sector de la jerarquía católica, y muy especialmente con una base cautiva que desde 1990 lo unge como caudillo antisandinista, Alemán decidió resistir, en la actitud arrogantemente suicida que caracteriza a tantos alcohólicos. Al destaparse la guaca podría haber abierto su sepultura política.

¿Sepultura del arnoldismo?

Abiertas sus guacas, Alemán será sepultado políticamente no sólo si Bolaños consigue los votos para apartarlo del cargo de Presidente de la Asamblea y para que responda en los tribunales, despojado de las naguas de la inmunidad bajo las que se esconde, según la última metáfora de Bolaños en vísperas de la guaca. Serán su sepultura las guacas si terminan de funcionar combinadamente dos factores: Estados Unidos y la legislación nacional.

Estados Unidos ya le ha retirado a Alemán el apoyo que le dio durante años para acabar con el FSLN. El mismo hallazgo de la guaca, impensable sin que el gobierno de Estados Unidos haya dado a Bolaños no sólo apoyo técnico sino luz verde para abrirla, es clara señal de que el Norte ha encontrado una alternativa más confiable y espera de Bolaños y del grupo bolañista del PLC gobernabilidad y estabilidad, y sucesivas victorias del liberalismo en las próximas contiendas electorales.

El segundo factor está pendiente. Si para dar un primer paso -indagar a Alemán y enjuiciarlo- la llave institucional la tiene la Asamblea Nacional, para dar un segundo paso es también necesaria la volátil, ambigua y pactada voluntad de los parlamentarios. Aún después de la apertura de la guaca, Alemán no ha dejado de presentarse como próximo candidato presidencial del liberalismo en 2006. Conseguir eliminar de la Constitución, de forma absoluta, para todos y para siempre, la reelección presidencial, debe ser objetivo central de cualquier lucha cívica contra la corrupción.

¿Sepultura del pacto?

La no reelección debe cerrar con losa firme la sepultura política de Alemán. Y abrir la de Daniel Ortega. El pacto, del que Alemán se ufana, y que Ortega niega, justifica, olvida o camufla oportunistamente, explica muchos callejones sin salida y zonas de sombra que nublan hoy el futuro de Nicaragua. El pacto polarizó, y por eso paralizó. Y le dejó minado casi todo el terreno institucional a Bolaños, y a cualquier otro proyecto que pretenda transformar el escenario político nacional. Si Bolaños no fuera capaz de desactivar pronto las principales minas del pacto, todas las tendencias indican que el pacto podría perpetuar la polarización bipartidista hasta arrastrarnos incluso a asistir a una contienda presidencial que enfrente a Alemán y a Daniel Ortega.

La Gran Convención del PLC arnoldista el 11 de julio y el acto de celebración del 19 de Julio fueron crónicas de esta tragedia que ya se nos quiere anunciar. Ambas celebraciones estuvieron orientadas a endiosar a ambos caudillos, ambos carentes de cualquier otro proyecto que no sea abusar de los pobres con una repetitiva retórica a favor de los pobres. Hay que reconocerles el tino de captar la rentabilidad de un proyecto como ése en una Nicaragua cada vez más empobrecida y con cada vez más pobres.

Coincidencias

Son muchas las coincidencias, las que el pacto explicitó y las que aún siguen vigentes. Acabada de abrir la guaca, dirigentes, funcionarios, voceros y fanáticos del arnoldismo, y en menor medida del danielismo, sugirieron o explicitaron, con discursos de variados tonos, un "proyecto político" en el que han venido coincidiendo: como la lucha contra la corrupción no deja espacio para atender los verdaderos problemas de la lucha contra la pobreza, y como dinero "lavado" -y por tanto ilegal- habría sido usado en la campaña electoral del PLC, urge revisar el origen de los fondos de campaña y si fuera necesario, destituir a Bolaños y a Rizo -quien lidera la construcción de un PLC alternativo al arnoldista- por la ilegalidad con la que llegaron a sus cargos. ¿Y después, además de la inestabilidad que provocaría este caos institucional? ¿Una Constituyente? Aliándose para tantear la posibilidad de obtener la destitución del Presidente, la Fiscalía solicitó a la Contraloría esa investigación. Y la Contraloría la acogió "por responsabilidad"...

¿Sepultura del caudillismo?

El destape de la guaca fue precedido por un incremento acelerado y cada día más agrio de las divisiones entre arnoldistas y bolañistas al interior del PLC. La lucha contra la corrupción que ha dividido a los liberales puede contribuir a democratizar el PLC, liberándolo de su condición de rehén de Alemán y su gente. La democratización de los partidos es condición para la democratización de Nicaragua. En el FSLN, donde esta meta es igualmente urgente, no se ven señales que apunten en esa dirección, lo que resulta aún más lamentable en una coyuntura como la actual, donde la nación está reflexionando o debe reflexionar sobre los riesgos que nacen del clientelismo político y del Estado prebendario.

Tanto el FSLN como el PLC compartimos la misma cultura política y vivimos los mismos problemas; caciquismo, caudillismo, corrientes dominantes de lealtades personales, órdenes de apartar a la gente que tiene espíritu crítico, intolerancia, reconoció Víctor Hugo Tinoco en estos calientes días de julio. A pesar de esta conciencia, bastante extendida en el sandinismo, el FSLN sigue siendo rehén de Ortega y su gente. Y hasta pareciera que la lucha contra la corrupción de Alemán ha cohesionado al sandinismo en torno al FSLN y al danielismo, por el "escrúpulo ideológico" de terminar siendo cómplices del neoliberal Bolaños. O peor aún, en la expectativa de que la sepultura de Alemán garantice la resurrección del FSLN y hasta una victoria de Daniel Ortega en la próxima contienda electoral.

Otro 19 de Julio

En la celebración del 19 de Julio, el FSLN abandonó por ineficaz el rosado florido y la meta de la "tierra prometida" que había usado en la reciente campaña electoral, y sacó de la gaveta símbolos rojinegros, canciones históricas y airados discursos antiimperialistas, para llevarnos por el túnel del tiempo hasta los años 80. Un cambio inquietante. En su discurso, Daniel Ortega apenas hizo definiciones sobre la coyuntura presente, lo que de él se esperaba. Arengando, inició remontándose a la guerra de los años 80 para concluir invitando a la gente a creer y a participar en una descabellada propuesta para solucionar la deuda externa y la deuda interna de Nicaragua: exigirle al gobierno de Estados Unidos pagar a Nicaragua 17 mil millones de dólares que le debe por el fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya de 1986, que condenó la participación de Estados Unidos en aquella guerra, fallo que jamás acató Estados Unidos y suma de dinero que jamás fue fijada por el tribunal internacional.

La celebración de ese día mostró la estrategia que le ha quedado a quienes hoy controlan el FSLN mientras gobierne Bolaños, construyéndose un auténtico liderazgo nacional de estadista. Carente, y sin interés en debatirlo si lo hubiera, de un proyecto realista, alternativo y colectivo, la suma de proyectos personales de sus dirigentes -a eso ha quedado reducido el FSLN- necesita más que nunca acentuar la retórica tradicional (¡el pueblo unido jamás será vencido!, ¡luchamos contra el yanki, enemigo de la humanidad!) para mantener cautivo durante estos difíciles años a un electorado que les garantice, al menos, seguir siendo "oposición", el grupo de poder con el que hay que negociarlo casi todo.

El FSLN no necesita ya de sujetos activos, necesita de electores pasivos. Los símbolos, las consignas y las canciones, las nostalgias, aseguran esos electores. Fijar metas imposibles contra el neoliberalismo o desfasadas contra el imperio del Norte, presentándolas como utopías populares y nacionalistas, garantiza cierta cohesión. Para alimentar esta estrategia, el FSLN tiene ante sí las olas universales de rechazo al gobierno de Estados Unidos por su impresentable política internacional y por su avasallante imperialismo económico, hoy minado por una cadena de megacorrupciones. Le será fácil al FSLN surfear en esas olas, achacando al imperialismo y a los organismos financieros internacionales todos los problemas nacionales, incluidos los causados por los actos de corrupción de sus dirigentes.

"Pactito" Bolaños - Ortega

Por su extravagancia o por su inconsistencia, la celebración del 19 de Julio apenas fue objeto de algún análisis serio. Como una extemporánea señal de respaldo a las voces más autorizadas del arnoldismo, que insisten en desmontar la lucha contra la corrupción porque debilitar a Alemán -sea lo que sea lo que haya hecho durante su gobierno- sólo fortalece al sandinismo y a Daniel Ortega, el Cardenal Obando comentó el acto del 19 afirmando que el FSLN se había oxigenado, que Ortega lució en su mejor momento y que esto abre posibilidades para que el FSLN gane las próximas elecciones.

Es ese eventual horizonte electoral uno de los "monos" con que Alemán trata de cohesionar a su base cautiva y frenar la lucha anticorrupción de Bolaños. Bolaños se está echando en brazos de los que destruyeron Nicaragua, Bolaños está haciendo un pactito con Ortega, Ortega le está tendiendo una cáscara a Bolaños para que resbale y llevemos a Nicaragua al caos. A este machacón discurso de Alemán no le faltan imágenes para alimentar fantasmas: inmediatamente antes e inmediatamente después de la guaca, Bolaños se reunió con Daniel Ortega media docena de veces. Los desayunos o almuerzos bilaterales han sido seguidos de fotos y declaraciones amistosas que resultan chocantes para bastantes sensibilidades.

Más allá de las imágenes, la realidad es que ambos políticos son taimados, se conocen bien, saben de los nexos de cada quien y miden cada centímetro de acercamiento o de alejamiento. Bolaños necesita los votos de los danielistas en la Asamblea, pero no es rehén de Ortega, como pretende hacer creer Alemán. Lamentablemente, es el sandinismo quien sigue siendo rehén del FSLN, y es eso lo que lo está debilitando en una coyuntura que por novedosa demanda creatividad.

La "otra" lavandería

En medio de coyuntura por novedosa también confusa, el gobierno de Estados Unidos quiso dar una señal "aclaratoria". Después de haberle quitado la visa de entrada a Estados Unidos a dos socios de Alemán -Byron Jerez y Jorge Solís, por presunción de lavado de dinero, y a la hermana de Alemán, Amelia, por suponer pensaba trasladarse a vivir en Estados Unidos -los tres "desvisados" están acusados en el caso de la guaca-, se la quitó al sandinista Bayardo Arce, también por sospechas de lavado de dinero. La señal tuvo un timing muy significativo. Y aunque la estrategia anticorrupción de Enrique Bolaños no es, ni puede ser, "o todos o ninguno" ni "todos a la vez", y aunque en su estrategia Bolaños ha incluido, tanto la investigación de la quiebra del Interbank como un diálogo "a dos bandas" con Daniel Ortega, Estados Unidos quiso recordar que, tarde o temprano, la estrategia anticorrupción también tendrá que trabajar "a dos bandas" y hallar otras guacas...

No somos "un país en situación normal"

Las divisiones en el PLC generadas por la lucha contra la corrupción -al priorizar Bolaños a los corruptos instalados en el PLC- están forzando una profunda recomposición política del país, borrando fronteras y creando nuevas alianzas. Expresión de esa recomposición fue el Mensaje a la Comunidad Internacional que, días antes de la apertura de la guaca, firmaron 90 personas de distintos orígenes ideológicos y de distintas prácticas políticas y sociales, todas con consenso y prestigio social. El texto fue un primer paso de lo que Bolaños llamó una unidad de conciencia nacional.

En el Mensaje, hecho público en la casa presidencial ante el cuerpo diplomático y la opinión pública, los Noventa se dirigen a la comunidad internacional para que demuestre su respaldo a la lucha contra la corrupción de la cual depende nuestro futuro, otorgando un tratamiento especial de emergencia a nuestro país, y para que mientras continúa esta lucha, fluyan sin dilaciones los recursos externos ya prometidos y los que están en vías de ser contratados. Pretender que Nicaragua sea sometida a los requerimientos y plazos de un país en situación normal -dicen-, no sería de ninguna manera justo, y sólo obraría en beneficio de quienes, siendo responsables de la presente situación, quieren seguir asentándose en la desesperanza y en el caos que sembraron. Dejarnos solos significa alentar a los corruptos; y el fracaso en esta lucha, por falta de respaldo internacional, crearía un pésimo precedente no sólo en Nicaragua, sino también en otros países de América Latina.

La canasta y la guaca

Días antes de este Mensaje, una delegación de diputados socialdemócratas europeos visitó Nicaragua y aseguraron que como voz de Europa vamos a pedirle al FMI un poco de flexibilidad para Nicaragua. Y es que la guaca -segundo gran clímax en la lucha anticorrupción después de la detención de Jerez-, se ubicó entre dos batallas campales en torno a dos iniciativas gubernamentales de reformas tributarias para equilibrar el insostenible déficit fiscal del país.

Es indispensable asegurarle al Estado una mayor recaudación, indispensable también poner orden y eliminar exoneraciones y privilegios. Precisamente, para poner así otro dique a la corrupción. Pero en el fondo y en la forma, en ambas iniciativas gubernamentales predominó la improvisación y la falta de diálogo con la sociedad civil para consensuar posiciones.

Después de enviar en junio a la Asamblea Nacional unas reformas parciales y aún no digeridas, mucho menos aprobadas, el 29 de julio el gobierno envió otro paquete, con reajustes al primer paquete de reformas fiscales. El FMI está exigiendo al gobierno establecer orden fiscal y formalizar este reordenamiento en una ley que debe aprobar la Asamblea con urgencia.

Para este segundo round de reformas, el FMI recomendó al gobierno gravar con impuestos los 53 productos de la canasta básica. El gobierno decidió gravar únicamente 11 productos más de los 24 ya gravados. La protesta fue nacional. "Tocar la canasta básica" pone siempre en alerta a todos los sectores y genera un enorme consenso en el rechazo. Empresarios, diputados arnoldistas y danielistas, la sociedad civil organizada, las ONG y la población en general se opusieron a gravar más la canasta básica.

Fue en este contexto que apareció el Mensaje de los Noventa pidiendo benevolencia al FMI, y fue en este contexto que Bolaños decidió lanzar la ofensiva final contra Alemán. En un mensaje a la nación anunció que ya no se gravaría la canasta básica porque había encontrado una guaca y con el dinero hallado vamos a cubrir en parte los ajustes tributarios que nos pide el Fondo Monetario. El debate tributario -que el gobierno no parece saber conducir- siguió abierto, dando espacio a sospechosas alianzas parlamentarias entre arnoldistas y danielistas.

Insurrección jurídica

El 17 de julio, al cumplirse 23 años de la insurrección armada y popular que puso fin a la dictadura somocista, varios sectores de la sociedad civil organizada hicieron un homenaje cívico a la jueza Gertrudis Arias, que abrió causa penal contra Alemán en abril, y a Alberto Novoa, quien actuó como Procurador Especial en los dos primeros casos de corrupción en febrero y abril. En circunstancias casi accidentales, Arias y Novoa se convirtieron en servidores públicos pioneros en la lucha anticorrupción, demostrándole a la nación y al propio Bolaños que "sí se puede".

Al agradecer el homenaje, Novoa, un convencido del poder transformador de la ley, destacó que en Nicaragua había comenzado a desarrollarse una insurrección jurídica. En otros países latinoamericanos -dijo- estamos viendo movilizaciones sociales, protestas populares. Aquí no, aquí, en esta pequeña e impredecible Nicaragua, estamos viendo y participando hoy en algo realmente novedoso: los nicaragüenses estamos transformando las leyes en un instrumento de lucha, y por primera vez en nuestra historia el derecho ha venido a sentarse a la mesa del poder.

Efectivamente, por primera vez en la historia de Nicaragua se emprende desde el poder una lucha contra la corrupción y se castiga desde el poder a personajes con poder. En este caso, y es un valioso signo de esta novedad, desde el poder se acusa a los del mismo partido, a quienes comparten una misma ideología, y no a los adversarios o enemigos políticos. No existe precedente en nuestra historia. Por eso, es cierto que, junto a la indignación nacional por lo descubierto, a la mesa ha venido a sentarse la esperanza.

Una larga lucha cultural

La lucha contra la corrupción no es sólo institucional-policial -buscar la guaca y hallarla-, no es sólo económica -cuantificar el tesoro y repatriarlo-, no es sólo política -sepultar la impunidad y el caudillismo, una cultura política desfasada que impide que nos desarrollemos-. Es también empezar a sentar bases y a crear controles para que nunca más sintamos la vergüenza de estar representados por ladrones. Por eso, porque no sólo se quiere curar la enfermedad del cuerpo social sino sanar su espíritu, ésta es una lucha cultural.

Ésta es su meta más difícil, la más lenta, la que requiere de más tiempo y mayores dosis de paciencia. La que obliga a todos y a todas a un profundo examen de conciencia sobre la cuota puesta por cada uno y cada una en el sistema de corrupción que tiene en la guaca una de las más perversas expresiones.

Una oportunidad para madurar

Atrás deben quedar concepciones como aquella que por los votos llevó a Arnoldo Alemán de la Alcaldía de Managua a la Presidencia de la República: "roba pero hace". Atrás aquel fatalismo en el que insistieron líderes políticos y religiosos durante los años del alemanismo: "siempre ha habido corrupción en Nicaragua y siempre la habrá". Atrás el argumento que hoy usan los dueños de la guaca: "nadie debe ser castigado porque todos somos corruptos".

Esperemos que en estos tiempos de búsqueda de tesoros malhabidos escondidos en guacas, logremos abrir en esta tierra insurreccionada, y por eso fértil, otras guacas, donde poner a madurar nuevas concepciones políticas, nuevos valores, nuevos comportamientos ciudadanos.

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